Los intendentes del FDT tomaron volumen y se quedaron con puestos claves

El cierre de listas del pasado sábado dejo marcado el mapa de fortalezas y debilidades en la provincia de Buenos de Aires. También mostró los acuerdos que se fueron construyendo en estos dos años de gestión del Frente de Todos. Y como pasa con todos los espacios políticos y sobre todo con las coaliciones y alianzas las elecciones y elección de precandidatos demuestra quién gana y quién no. Quien cobra y quien no.

El foco esta vez lo pusimos en la figura de los intendentes que fueron claves para llevar adelante estos dos años de mandato del presidente Alberto Fernández, pero también para lo que fue en el pasado la construcción del frente gobernante y para sostener la calma en el territorio mientras se atraviesa una crisis sanitaria y económica.

Repitiendo la máxima de Néstor Kirchner el actual presidente supo rodearse de jefes comunales leales desde siempre y otros con los que ha sabido construir un vínculo estrecho en estos últimos meses. Ejemplo de eso son el ministro de Obras Públicas alineado con la figura de Fernández desde el 2013 para acá, Gabriel Katopodis, y el intendente de Hurlingham y su mano derecha en el territorio bonaerense, Juanchi Zabaleta. Pero también supo estrechar lazos y escuchar al ministro de Hábitat y Vivienda y ex jefe comunal de Avellaneda, Jorge Ferraresi.

Un poco por su influencia, otro tanto por el guiño de Sergio Massa y finalmente por los acuerdos que fue tejiendo este año el flamante presidente del PJ bonaerense y diputado nacional, Máximo Kirchner, los intendentes fueron grandes ganadores en este cierre.

En la provincia de Buenos Aires lograron poner representantes suyos en las listas seccionales -8 secciones tiene el territorio bonaerense- e incluso varios de ellos ser candidatos.

Los jefes comunales alineados con la figura del intendente de Lomas de Zamora, Martín Insaurralde, celebran el esquema actual. Algunos díscolos y que no se sienten contenidos ni por Insaurralde, ni por Máximo, ni por Massa, pero que si tienen buen diálogo con el Presidente de la nación le afirman a este medio «que esta todo bien, pero que faltó un representante en la lista de diputados nacionales por la provincia». En un momento sonó fuerte Insaurralde para ocupar ese lugar, pero finalmente la paga para ellos se dio en términos de construcción distrital.

El peso de los intendentes fue tal que entrada la noche del sábado 24 de julio todo indicaba que la cabeza de lista para ir por la competencia de senadores provinciales por la primera sección iba a ser la actual ministra de Gobierno bonaerense, Teresa García, de línea directa con Cristina Fernández pero que igual sabe mantener el diálogo con todos los sectores. Finalmente, ese intento quedó trunco y ahí se vio la primera paga a los intendentes.

El jefe comunal de Malvinas Argentinas, Leo Nardini, logró poner allí a un hombre suyo, Luis Vivona y el acuerdo hizo que García quede en el puesto dos de la lista. Eso hizo que el tercer lugar de esa lista quede para Gustavo Soos, hombre de Merlo que responde a otro intendente de peso en el PJ provincial, Gustavo Menéndez. Luego tocó el lugar de Massa que puso en el cuarto lugar a Sofia Vanelli, actual concejal de Vicente López-con chances de entrar-y el quinto para otro representante de intendente: Javier Rehl, secretario de Gobierno de Escobar, que responde a Ariel Sujarchuk.

La conformación de la lista de la primera comprueba y demuestra con qué lógica se confeccionaron las listas de la provincia.

Otra de las fotos que demostró cómo funcionó el acuerdo tiene que ver con lo que dejó de crónica el municipio de Hurlingham. Allí La Cámpora en términos locales quiso aprovechar el cierre para ganar volumen y promover como cabeza de lista al dirigente local Martín Rodríguez. No hubo acuerdo con el intendente Zabaleta y el cierre concluyó con dos listas. La camporista y la encabezada, con sorpresa para todos, por el propio intendente. Ahí se activó el acuerdo frentista y sobre todo el acuerdo labrado por los intendentes y el presidente del PJ provincial y se bajaron ambas opciones. Finalmente se logró lista de unidad con una salida que el Frente de Todos demuestra y que sin ir más lejos se vio con la candidatura de Sergio Palazzo, el titular de La Bancaria. Cuando hay duda en la puja entre el cristinismo, la opinión del presidente o la de Massa, se le abre la puerta a un dirigente social o gremial. El nombre elegido en ese distrito es el de Viviana Lodos, dirigente de SUTEBA. El acuerdo necesitó que intercedan Andrés «Cuervo» Larroque y el ministro Katopodis.

Según supo Realidad en Aumento hubo un cruce fuerte entre Zabaleta y el presidente que después sirvió para acomodar la ecuación. Como se dice en la vieja jerga política «la rebeldía garpa».

Pero el peso y presencia de los intendentes no termina ahí. En la cuarta, el intendente de Carlos Casares, Walter Torchio, quedó como cabeza de lista a senador provincial por esa sección. El hombre de buen diálogo con la figura de Victoria Tolosa Paz y con Aníbal Fernández, tiene asegurada su banca en el senado, y Axel Kicillof se sumaría un jugador importante que cuenta con comunicación con todos los sectores del frente y que puede colaborar para invertir la ecuación de minoría que tiene actualmente el gobernador en ese recinto.

En la lista de la quinta sección otro intendente también se asegura su banca. El intendente de las Flores, Alberto Gelené, quedó como tercero en la lista de senadores provinciales y es uno de los que supo desde el interior de la provincia construir un tándem efectivo con el gobernador. Una muestra del paciente trabajo que viene haciendo Kicillof en esa construcción territorial que se le reclama pero que tiene algunos chispazos para observar cómo destacan desde el distrito del jefe comunal de esta sección.

En la sexta, el intendente de Monte Hermoso, Alejandro Dichiara, se quedó con el primer lugar de la lista, en este caso, a diputado provincial.

En la séptima el acuerdo fue distinto y allí intercedió el presidente de la Nación al sellar un acuerdo con el actual diputado nacional Eduardo «Bali» Bucca. Que ahora será candidato y encabeza la lista a senadores provinciales por esa sección. Allí la figura no es de un intendente actual, pero si de un hombre del territorio. Bucca ya fue intendente de Bolívar durante dos mandatos y además este acuerdo sirvió para contener a algo del peronismo díscolo reunido por Florencia Randazzo. La banca que hoy tiene Bucca en el Congreso nacional la obtuvo en acuerdo con el ex ministro por el Frente Cumplir. Esta novedad que se tuvo sobre el cierre tuvo que ver con la premisa que le bajó el Presidente a todos los dirigentes con lapicera en este armado: «ampliar sin sumar cualquier cosa».