Otro hierro caliente

La condena diplomática promovida por la OEA contra el gobierno de Nicaragua es el nuevo capítulo de la injerencia norteamericana sobre los países que desobedecen, aun minados de contradicciones y políticas económicas erráticas, los dictados del neoliberalismo. Detenciones de opositores, scrum entre los medios de comunicación y las fundaciones financiadas por la CIA y el eco de la derecha continental desparraman sus fichas sobre el tablero del debate público, ante la coordinación geopolítica de México y Argentina para que no se pudra todo en el patio trasero.